Honoring our beloved father

Contribuyendo al desarrollo social e inclusivo de Bahía de Banderas.

Fundación James Mckenney

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Sembrando futuro en Bahía de Banderas

Somos una organización comprometida con el desarrollo integral de las comunidades de Bahía de Banderas. A través de programas de educación, alimentación y salud, buscamos mejorar la calidad de vida de las personas más vulnerables, fomentando valores como la solidaridad y la inclusión.

Transformando vidas, construyendo un futuro mejor

Biografía James McKenney

James McKenney: Un espíritu indomable

James McKenney, un hombre que superó adversidades y convirtió obstáculos en oportunidades. Su historia inspira a todos aquellos que buscan alcanzar sus sueños.

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Trabajamos por un Bahía de Banderas más justa y equitativa, donde todas las personas tengan acceso a educación, salud y alimentación de calidad.

Eje Social: Desarrollo integral

Banco de alimentos

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Banco de alimentos

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Jornadas de atención a grupos vulnerables

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Guiados por valores como el amor, la empatía y la solidaridad, trabajamos incansablemente para construir una comunidad más justa y equitativa. Nuestra visión es ser la fundación más trascendente de Bahía de Banderas, dejando un legado de bienestar y desarrollo social.

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James McKenney

James Mckenney nació el día 11 de Abril de 1955 en New Hampshire, Massachusetts, viniendo de una familia con situaciones difíciles, siendo el penúltimo de 6 hijos; creció y pasó la mayor parte de su vida en Andover, Boston y estableció su residencia por más de 35 años en San Francisco, California.

No todo fue sencillo en la vida de James Mckenney. A la edad de 25 años un terrible accidente en motocicleta marcó su vida, y truncó sus sueños momentáneamente, después de pasar 6 meses en un hospital y 3 de ellos en coma, despierta finalmente, y descubre que perdió una de sus piernas, y que su vida cambiaría para siempre; con la pérdida de su pierna, pierde su bote, que era donde él vivía, su trabajo, su relación, su motocicleta, y adquiere deudas inimaginables, lo que en la vida de cualquier ser humano esto sería un obstáculo insuperable, pero no para James Mckenney.

Es así como él decide viajar a Baja California, México, en búsqueda de paz y recuperación, acompañado únicamente de una maleta con sus recuerdos más preciados. Al llegar ahí parecía que su destino cambiaría, sin embargo, se enfrenta a un duro golpe, donde el robo de sus únicos recuerdos aparentemente sería la estocada final, el destino le tenía preparado perderlo todo, para así posteriormente, ¡ganarlo todo!

Finalmente, con la personalidad que siempre lo caracterizó, no se derrumbó ni se dejó caer, solamente sonrió y le preguntó a Dios, ¿qué más quieres de mí?

Años más tarde llegó la respuesta que Dios y la vida le tenían preparada, gracias a su empeño y fuerza de voluntad comenzando desde cero, arranca con un nuevo rumbo en su vida, donde se consolida como empresario con la creación de GOLDENGATE DOOR AND WINDOW INC y a su vez como un desarrollador exitoso de diferentes áreas residenciales en la bahía de San Francisco, y no es sino hasta la llegada de sus hijos, Donald y Max, donde él alcanza y conoce la felicidad plena, a pesar de siempre haber contribuido de una manera esplendida para diferentes proyectos altruistas entre los que destacan, desayunos en fechas especiales para indigentes, como lo son Thanksgiving, Navidad y Año Nuevo, entregando por promedio anual más de 7 mil desayunos; destaca también otros apoyos como lo son prótesis, aparatos ortopédicos, cirugías, becas y apoyos económicos a personas necesitadas.

Así es como a Dios le mostró a Jim que las adversidades y su discapacidad no serían nunca un impedimento, cuando desde el corazón se tiene la convicción por ayudar, es por ello que el legado que hoy deja en la tierra marca un nuevo rumbo para Bahía de Banderas, y como él decía: “El día que encuentres un trabajo o una actividad en la que sientas que tu corazón canta de alegría todos los días, será el último día de tu vida que trabajes, y el dinero llegará por añadidura”.